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José Homero
La verdad no sabíamos si decírselos o no, pero ya salió, desde el 2 de febrero, el nuevo número de Performance. Dicen que está de webos y eso porque como siempre la política cultural veracruzana da mucha tela para recortar. Y aunque no se mate víbora en viernes, les recomendamos leer la columna de El Diletonto, sea en la versión impresa o en internet, en el blog El Diletonto, porque desmenuza la cíclica sensación de que el IVEC desaparece, una sensación incrustada desde la génesis de este instituto fundado por el gobernador policía, Fernando Gutiérrez Barrios.
Por si fuera poco en otra columna se documenta la trayectoria de Manuel Zepeda Ramos, director casi eterno de Difusión Cultural de la Universidad Veracruzana. Los amantes del chisme podrán pasar un rato de sano esparcimiento ahora que se dice que los días del capo del Cartel de la Calle Juárez tocan a su fin. Quién sabe, Manolo presume de ser pariente de Karime Macías y asegura que el doctor Duarte le dará un puesto o al menos exigirá una indemnización. Lo cierto es que llevarse a la Orquesta Sinfónica de Xalapa a Chiapas, en camioncito, en un viaje de catorce horas, para un acto político, y ponerlos a amenizar la cena, complacencias incluidas, fue la nota que derramó el vaso.
Así que ya saben, a leer, a divertirse y a celebrar que Performance es un verdadero ejemplo de libertad de expresión.
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